La marca es un activo empresarial que debe cuidarse de forma apropiada para que no se pierda o extinga.
El catálogo de marcas supone uno de los principales activos de una organización empresarial. Sirven para hacer llegar a la mente del público un determinado nivel de calidad del producto o servicio comercializado y para ampliar la buena reputación de la compañía.
Estos serían los principales supuestos que pueden llevar a la pérdida del derecho de marca y que deben ser controlados con el fin de mantener vivos unos activos valiosos:
IMPAGO DE LAS TASAS DE RENOVACIÓN:
- Las marcas con validez en el territorio español se registran por primera vez con una validez de 10 años. Una vez registrada la marca, esta puede renovarse indefinidamente cada 10 años.
- La no renovación de la marca implicará la extinción de los derechos concedidos sobre una marca registrada.
- Tanto la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM) como la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO) ofrecen un periodo adicional de seis meses, durante el cual se podrá seguir solicitando la renovación.
- Si no se presenta la solicitud de renovación o se presenta expirado el periodo adicional, la marca quedará anulada y retirada del Registro.
CADUCIDAD POR FALTA DE USO:
- La Ley 17/2001, de 7 de diciembre, de Marcas impone al titular de una marca registrada la obligación de utilizarla. La falta de su uso durante un plazo ininterrumpido de cinco años permite que un tercero pueda ejercitar acciones judiciales solicitando la caducidad de dicha marca.
- El titular puede eliminar esta amenaza si reanuda el uso efectivo de la marca en los tres meses anteriores a la presentación de dicha demanda.
- Corresponderá al titular de la marca demostrar que esta ha sido usada de manera efectiva y no simbólica: un uso amplio, público y con verdadera relevancia exterior.
EL CASO NESTLÉ
Un ejemplo claro de pérdida de una marca registrada por falta de uso, es lo que le sucedió a Nestlé con varias de sus famosas marcas de helado: CAMY, AVIDESA y APOLO.
Los puntos que se tuvieron en cuenta para considerar la falta de uso en estos casos fueron:
- La ausencia de la marca en la red comercial.
- La falta de inversión o actividad en publicidad, marketing, merchandising o presentación de los productos.
- La no mención en catálogos de venta de los productos o en las facturas que se aportaron como pruebas.
CONSEJOS PARA NO PERDER UNA MARCA
- Realizar un adecuado seguimiento de todos los registros de marca de los que sea titular la empresa y tener claro el calendario de fechas de renovación.
- Guardar pruebas que acrediten el uso real y efectivo de la marca: facturas, inversión en marketing, presentación de productos, catálogos de ventas, presencia en red comercial, artículos en prensa.
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